Nuestro calendario de trabajo

sábado, 9 de febrero de 2008

Improvisando, que es gerundio


Con la improvisación seguimos poniendo los cimientos de nuestro montaje ¡todos estamos de obras!

Cada día los personajes basados en Alicia van creciendo y tomando forma. En la última sesión las improvisaciones nos llevaron a...

  • una botellona donde todos fingían pasárselo bien haciendo lo que otro grupo esperaba de ellos: beber hasta vomitar, abusar de los demás o pasar de todo y todos. Luego, una vez que la presión del grupo había desaparecido, volvían a ser quienes eran, y se iban juntos a un burguer.
  • unos mendigos agobiaban a una reina y un flamenco que no querían ni tocarlos. Luego, un pobre naipe que quería ayudar acababa sufriendo un robo.
  • en una clase, una profesora agobiada por unos alumnos agobiantes acababa uniéndose a ellos y sorprendiéndoles.
  • una familia nada preparada para la cena de nochebuena, donde el padre-naipe se dedica a ver la tele, el abuelo-sombrerero está sólo pendiente de sus manías, el niño-conejo tiene prisa por llegar a los regalos, y el adolescente-gato rehúye de prepararse y ducharse. Hasta que la madre-reina ejerce de una vez de reina y los pone derechos.
Vamos, que nuestra Alicia sigue dando mucho de sí. Y lo que queda...

domingo, 3 de febrero de 2008

Nuestros personajes van cobrando vida


El conejo con prisa, la liebre de marzo, el sombrerero loco, los naipes con su reina (y su flamenco-palo), el gato de Cheshire, la oruga,...Entre todos empezamos a dar vida a estos personajes, y descubrimos que
  • los naipes se parecen mucho a unos oficinistas haciendo un trabajo absurdo y repetitivo para un jefe tirano (con su pelota oficial: el flamenco-palo-de-críquet, y con su secretaria maravillosa y ajena a todo, como una rosa).
  • la oruga se mueve en tres partes cada vez, arrastrando las demás. Por otro lado, nos recuerda mucho a alguien que viva enganchado a las drogas.
  • el sombrerero loco y la liebre de marzo pueden trasladar su mundo desquiciado a las rebajas, y al afán compulsivo por comprar sin sentido.
  • el conejo sigue con prisa para todo. Siempre hay algo de su cuerpo en movimiento. Habrá que entrenar el movimiento de nariz y boca en círculo. Estuvo jugando a lanzar una zapatilla, pero...con prisa.
  • El gato de Cheshire se nos ha metido en la tele y nos mira desde ella. Sigue tan irónico como siempre.